Las cortinas metálicas, también conocidas como persianas metálicas, son sistemas de protección y seguridad ampliamente utilizados en comercios, almacenes y locales industriales. Están diseñadas para cubrir aberturas como puertas y ventanas, brindando seguridad contra intrusiones, robos y vandalismo, así como protección contra condiciones climáticas adversas.

Estas cortinas están construidas típicamente con láminas metálicas interconectadas, que pueden ser de acero galvanizado, aluminio o incluso acero inoxidable, dependiendo de los requisitos específicos de resistencia y durabilidad. Las láminas se deslizan verticalmente a lo largo de guías laterales montadas en los marcos de la abertura, permitiendo su apertura y cierre de manera suave y eficiente.

En términos de funcionamiento, las cortinas metálicas pueden ser operadas manualmente mediante un mecanismo de cadena, manivela o polea, o pueden ser automatizadas con un motor eléctrico que las eleva y baja mediante un interruptor, un control remoto o incluso mediante sistemas de automatización más avanzados.

Estas cortinas pueden ser personalizadas en términos de tamaño, color y diseño para adaptarse a las necesidades estéticas y funcionales de cada espacio. Además, pueden incluir características adicionales como perforaciones para ventilación y visibilidad, sistemas de bloqueo reforzados para mayor seguridad y opciones de revestimiento para resistir la corrosión y el desgaste.

En resumen, las cortinas metálicas son una solución versátil y efectiva para la protección y seguridad de espacios comerciales e industriales, ofreciendo durabilidad, funcionalidad y opciones de personalización para satisfacer una variedad de necesidades y requisitos específicos.